La NASA lleva varios años comunicando sobre su programa lunar Artemis, el cual se dividirá en tres misiones y se llevarán a cabo a lo largo de los próximos cuatro o cinco años. El objetivo de ello es establecer presencia humana en la Luna.
Se estima que para finales de este año se realice el lanzamiento de Artemis I. Mientras que la segunda misión se llevará a cabo como una repetición de la primera, pero contará cuatro humanos a bordo de Orión (vehículo especializado para el transporte de los astronautas). Finalmente, Artemis III, enviará en su lugar a dos humanos a la Luna y de vuelta mediados de esta década.
Actualmente, la NASA ha desarrollado al menos dos opciones de cronograma "en guía".
Cadencia: el cual da prioridad a los lanzamientos regulares.
Contenido: prioriza el lanzamiento sólo cuando las cargas útiles más significativas están listas.
Estos dos cronogramas juntos revelan que la NASA está luchando por incluir un ambicioso plan de exploración en un presupuesto bajo y el resultado es un programa lunar lento que, en gran parte, no cumple los objetivos de la Política Espacial Nacional de Estados Unidos.
Entretanto una portavoz de la NASA, Kathryn Hambleton, dijo: "La NASA sigue adelante con sus planes básicos para las misiones Artemis más allá de Artemis III. La agencia evalúa rutinariamente arquitecturas alternativas como parte prudente de la planificación programática."
Se dice que hay enormes lagunas entre las misiones. Para cerrar una brecha de tres años, la NASA está considerando la creación de una misión "Artemis III.5" que requeriría que la agencia adquiriera una cuarta etapa superior provisional y retrasara el desarrollo de otros programas clave.
La lenta progresión de las misiones retrasa el desarrollo de un "campamento base" en la Luna durante años y el primer emplazamiento de un hábitat en la superficie lunar no llegará hasta 2034.
La NASA pasará los próximos 10 años centrada en el montaje de una pequeña estación espacial en la órbita lunar.
Cadencia vs. contenido
Los calendarios muestran que la NASA está considerando si dar prioridad a un ritmo regular de misiones o a cargas útiles más significativas. En particular, la NASA está pensando la posibilidad de añadir una misión "Artemis III.5" en el plazo de 2027 para evitar el vacío de tres años que se produciría en caso contrario. Esta misión requeriría un cuarto lanzamiento de la versión original del cohete Space Launch System.
Es probable que esta misión cueste unos $5.000 millones USD y que envíe a cuatro astronautas a la pequeña puerta lunar, con dos bajando a la superficie de la Luna. Para apoyar la misión Artemis III.5 y distribuir uniformemente los huecos de vuelo, los documentos dicen que la NASA tendría que retrasar varios proyectos Artemis, incluyendo: Gateway Logistics, los rovers lunares presurizados y no presurizados, un hábitat de superficie y el programa Booster Obsolescence and Life Extension para actualizar los impulsores laterales del cohete SLS.
La razón a los largos intervalos entre misiones la apuntan al sistema de financiamiento, puesto que, la NASA está tratando de encajar una gran cantidad de hardware nuevo en un presupuesto limitado. El Congreso no se ha mostrado demasiado entusiasta a la hora de financiar todos estos nuevos programas. La agencia también puede estar preocupada por el hecho de que, tras el lanzamiento de los elementos principales de la estación orbital Lunar Gateway, los módulos adicionales no estarán listos para su lanzamiento hasta la última parte de la década de 2020.
Por su parte, la NASA también reconoce que es posible que se produzcan retrasos con la versión mejorada del cohete Space Launch System, conocida como Block 1B. Este cohete tiene una segunda etapa más potente, la "etapa superior de exploración", que puede llevar módulos Gateway a la Luna junto con la tripulación a bordo de Orion. Sin embargo, la nueva etapa superior dista mucho de estar lista y la semana pasada el inspector general de la NASA dijo que la enorme torre de lanzamiento móvil utilizada para apoyarla llevaría años de retraso y estaría sustancialmente por encima del presupuesto. Según el calendario de "cadencia" propuesto por los planificadores de la NASA, esta versión del bloque 1B del cohete SLS no tendría que estar lista hasta 2029.
La semana pasada, durante una comparecencia ante la prensa, el alto funcionario de la NASA responsable de estos calendarios -Jim Free, Administrador Asociado para el Desarrollo de Sistemas de Exploración- dijo que la agencia está trabajando en "múltiples manifiestos" debido a los presupuestos y otros factores. Dijo que, como parte del proceso presupuestario de la NASA para el año fiscal 2024, está tratando de elaborar un plan único para la exploración hasta, al menos, la misión Artemis VI.
Free también reiteró que el objetivo de la NASA es alcanzar una cadencia de lanzamientos anuales, lo cual es importante porque hace que la NASA haga más cosas en la Luna y cerca de ella, más rápidamente. También ayuda con los costos, ya que hay grandes costos fijos con el Sistema de Lanzamiento Espacial y la nave Orión, independientemente de que los vehículos vuelen o no durante un año determinado. "Absolutamente nuestro objetivo es llegar a esa cadencia anual".
Anteriormente, la NASA indicó que intentaría alcanzar una cadencia anual con la misión Artemis IV en 2027. Según los calendarios revisados, esa cadencia anual no llegará antes de 2030, por lo menos.
Campamento base
Como parte de la formulación del Programa Artemis, la Casa Blanca de Trump actualizó la "Política Espacial Nacional de los Estados Unidos de América" en 2020. La Administración Biden ha seguido en gran medida estos principios, incluyendo la adopción del Programa Artemis.
Entre los objetivos esbozados en este documento estaba la ampliación de la actividad económica humana en el espacio "estableciendo una presencia humana permanente en la Luna y en cooperación con la industria privada y los socios internacionales, desarrollar infraestructuras y servicios que permitan la exploración impulsada por la ciencia, la utilización de recursos espaciales y las misiones humanas a Marte."
Ese mismo año, la NASA esbozó sus planes para la "sostenibilidad de la superficie lunar" en un informe dirigido al Consejo Nacional del Espacio. La intención de todo esto era clara: la NASA pretendía establecer una presencia sostenida en la Luna y sus alrededores, demostrando tecnologías clave que eventualmente apoyarían las misiones humanas a Marte. Los elementos clave incluían un vehículo de terreno lunar, una "plataforma de movilidad habitable" que permitiría a las tripulaciones realizar viajes a través de la Luna de hasta 45 días y un hábitat de superficie para hasta cuatro tripulantes. Esto se conoció como el "campamento base Artemis".
Sin embargo, los calendarios internos de la NASA aplazan cualquier desarrollo real de dicho campamento base hasta la década de 2030. Incluso si la NASA consigue enviar un vehículo de terreno lunar antes de esa fecha, funcionalmente sería poco diferente del rover eléctrico no presurizado utilizado durante el programa lunar Apolo hace cinco décadas. En otras palabras, Artemis se asemejaría a Apolo, más que a algo nuevo.
Clive Neal, geólogo de Notre Dame y destacado científico que aboga por un programa de exploración lunar, dijo que el calendario interno de la NASA está tan extendido que carece de sentido. El plan también ignora la política espacial estadounidense de centrarse en el desarrollo de una presencia permanente en la Luna.
Se dice que según un cálculo estimado el programa habrá requerido $93.000 millones USD para 2025. Se calcula que las primeras cuatro misiones Artemis costarán cerca de $4100 millones USD cada una. Probablemente este sea uno de los motivos por el cual la NASA esté teniendo inconvenientes con dicha misión.